martes, 26 de noviembre de 2013

Cuetzalan del Progreso

Cuetzalan es uno de esos "pueblos mágicos" que los habitantes de la región centro del país adoran visitar. Quizá para escapar del frenesí de sus propias existencias.

El decir popular afirma que en Cuetzalan se vive como antaño. Difiero. Los habitantes conservan la vestimenta tradicional, pero han aprendido los modos del capitalismo. Rogando por una compra y haciendo uso de la presión social cuando te niegas a adquirir sus mercancías, imposibilitado de satisfacer a todos.

Oculta y dispersa sobrevive aún  la antigua y callada dignidad de los habitantes originales, en un niño  cuyo rostro no olvidaré y en esos hombres de Cuetzalan que bajan de la sierra a ofrecer sus mercancías: café, especias, cacao, pimienta, canela, sal de ajo. Con ese Cuetzalan me quedo.





Restaurante Yoloxochitl 


Señalado por los locales como el mejor del lugar. Es mi definitiva recomendación si se desea explorar la gastronomía local.

El menú ofrece: cecina, hongos, sopas, pollo almendrado o en chile poblano, tacos dorados enchiladas, envueltos y tlacoyos. Puede elegirse entre salsa verde o roja para cubrirlos. No está de más advertir que ambas son bastante picantes, por lo que si no gustan mucho de esta sensación pidan que les pongan poca.
Todas las porciones son generosas y dejarán satisfecho hasta el más voraz de los apetitos.

En las bebidas destaca el café negro, cultivado en la región de la Sierra Norte del estado de Puebla, a la que pertenece Cuetzalan.


El horario es amplio y se sirve desde el desayuno hasta la cena en una cómoda y espaciosa construcción, cuya terraza ofrece una agradable vista del templo principal.  

El único platillo que no disfruté fue la ensalada, una de las peores que haya tenido la desgracia de consumir, pero quizá la culpa haya sido mía por ordenarla teniendo tantas otras cosas deliciosas para consumir.

Mis favoritos son el  platillo Yoloxochitl (la especialidad del lugar) y el Itacate.


  • Platillo Yoloxochitl: Incluye cecina, hongos en escabeche, tlayoyos, enchiladas y frijoles. 
  • Itacate: Dos tacos dorados, dos gorditas, dos tlacoyos y dos enchiladas. 


Los dejarán dichosos y dispuestos a combatir el frío de sus noches, apacibles y solitarias.



Domo-kun gusta de la comida mexicana :]

Platillo Yoloxochitl

 
¡Itacate!


Para beber

Pa' desayunar


La infame ensalada

UBICACIÓN:
Calle 2 de abril no. 1 
Centro histórico 
Teléfonos:   (233)  33 103 35 y 2331021889 (celular)
Correo electrónico: restauranteyoloxochitl@gmail.com

lunes, 25 de noviembre de 2013

Zamora de Hidalgo - La Pantera Rosa


La Pantera Rosa




El azar y el hambre convergieron a mi favor para descubrir este restaurante durante una visitar familiar a Zamora, en el estado de Michoacán.

La Pantera Rosa es una fabulosa aguja en el pajar de la zona centro de esta pequeña ciudad.

Incrustado en la memoria llevo el sabor de su queso fundido que me persigue durante las noches hambrientas.

Carnes asadas y en su jugo es lo que ofrecen en un menú reducido pero sustancioso, al que acompañan quesadillas, aguacate y un queso fundido que hará su cabeza explotar. En las bebidas destaca el agua de horchata, servida en un tarro de barro helado, que mejora sin duda su delicioso sabor. 

La tradición mexicana se hace presente no sólo en el menú sino en la vistosa y colorida decoración: en su árbol del que brotan corazones de vidrio soplado y en su vajilla de barro. 

A la hora de ordenar es importante tomar en cuenta las porciones que maneja el platillo de carne en su jugo: chico, mediano y grande.

Mi consejo es que si van en grupo ordenen de todo, porque el alambre es también imperdible. Si van solos o en pareja una carne en su jugo grande o mediana, un alambre y un queso fundido. Por favor, no dejen pasar la oportunidad de pedir también aguacate, el cual tiene un costo extra, pero la calidad del aguacate michoacano, suave y cremoso como mantequilla, los hará olvidar en un instante el cargo.